Autocoaching EMDR: Más que un mero procesamiento – cómo pueden reforzarse y utilizarse específicamente las experiencias positivas
El método EMDR es conocido principalmente como un método eficaz para procesar experiencias estresantes. Sin embargo, también ofrece un potencial que suele pasarse por alto: el entretejido y refuerzo selectivo de experiencias positivas como parte del autocoaching. El sexto paso del proceso de autocoaching EM DR está especialmente dedicado a esta posibilidad. Se aborda específicamente en las instrucciones del autocoaching EMDR. Eso sí, en relación con una sesión completa de autocoaching EMDR. Sin embargo, una sesión completa de autocoaching EMDR no siempre es realmente necesaria cuando se trata de entrelazar y anclar momentos positivos. Más sobre esto en el vídeo y al final de este artículo.
De la desensibilización al fortalecimiento
La EMDR se basa en la activación de redes neuronales mediante estímulos bilaterales -normalmente movimientos oculares- mientras se evocan simultáneamente recuerdos estresantes. Sin embargo, este mecanismo también puede utilizarse para anclar experiencias de connotación positiva más profundamente en la memoria emocional. Centrarse conscientemente en recuerdos fortalecedores y alegres, en combinación con estímulos bilaterales lentos, puede hacer accesibles los recursos emocionales y estabilizarlos permanentemente.
Utiliza conscientemente los momentos positivos
No sólo los acontecimientos importantes de la vida, sino también las pequeñas experiencias cotidianas, aparentemente poco espectaculares, pueden servir de recurso. Una conversación cariñosa, la sensación de un rayo de sol en la piel o la sonrisa fortuita de un transeúnte son ejemplos de momentos que albergan el potencial del autocoaching dirigido. Reviviendo breve y conscientemente esas situaciones y aplicando estímulos bilaterales, se puede generar una resonancia emocional más profunda.
Anclaje neuroemocional y fomento de la resiliencia
Los estudios neurocientíficos indican que los estados emocionales positivos, cuando se activan conscientemente y se refuerzan repetidamente, no sólo producen una mejora del estado de ánimo a corto plazo, sino que también contribuyen a la resiliencia a largo plazo. Esta forma de autocuidado emocional puede tener un efecto estabilizador, sobre todo en fases de tensión psicológica o cuando las personas son más susceptibles al estrés. A diferencia de las técnicas afirmativas, aquí no se hace hincapié en la reinterpretación cognitiva, sino en la vivencia de las emociones y su integración selectiva en la imagen de uno mismo.
EMDR como instrumento de cultivo interior
La ampliación del autocoaching EMDR para incluir elementos orientados a los recursos abre un nuevo enfoque del desarrollo personal. De este modo, el método se entiende no sólo como una herramienta de curación, sino también como un medio de cultivar la fuerza interior y la autoeficacia emocional.
Nota:
El autocoaching EMDR puede integrarse de forma flexible en la vida cotidiana, incluso sin una sesión completa. Una aplicación breve y focalizada con recordatorios positivos y movimientos oculares lentos suele bastar para conseguir efectos duraderos. Esto funciona bien, por ejemplo, justo antes de acostarse, como se explica aquí en el artículo sobre coaching ultracorto.