Es hora de poner fin a todas nuestras creencias negativas. ¡EMDR ayuda!
Refuerce su propia imagen y confianza en sí mismo con EMDR en autocoaching
La idea que una persona tiene de sí misma influye decisivamente en su forma de pensar, sentir y actuar. Esta imagen de uno mismo se compone de la propia imagen, la imagen deseada y la imagen externa reflejada por el entorno. Cuanto más coherentes sean estas tres imágenes, más auténtica parecerá la persona, más eficiente será y más disfrutará de su vida.
Es importante darse cuenta de que siempre se trata de una cuestión de imaginación, es decir, de la interpretación que uno hace de esas imágenes de sí mismo. Este es, como tantas otras veces, el quid de la cuestión. Nada es “intrínsecamente así”. Siempre es el individuo quien interpreta la situación o la imagen.
Nos damos cuenta de ello cuando descubrimos que nuestra perspectiva puede cambiar en el tiempo, a veces en cuestión de segundos. Es un constante emparejamiento de nuestras impresiones sensoriales con nuestra interpretación de las mismas.
A menudo la gente se da cuenta de que no está satisfecha consigo misma, y con ello se refiere a la imagen que tiene de sí misma. Prefieren ser lo que desearían ser. Como la imagen de tus sueños. Puede tratarse de habilidades o de atributos puramente físicos. Quién no las conoce, estas expresiones de autodesprecio.
Creencias autodespreciativas:
- "¡Estoy demasiado gordo!"
- "¡Mis piernas son demasiado cortas!"
- "¡Mis pechos son demasiado pequeños!"
- "¡Mi nariz es demasiado grande!"
- "¡Mi culo está demasiado gordo!"
- "¡Soy demasiado feo!"
- "Soy demasiado estúpido"
- "No soy lo suficientemente inteligente"
Y así sucesivamente. La lista de autodesprecios externos e internos es larga, muy larga. Comprensiblemente, puede ser de gran ayuda cambiar las creencias personales y, en especial, las despectivas sobre la propia imagen de uno mismo. Al fin y al cabo, esto se traduce en una actitud positiva y afirmativa ante la vida.
El defecto percibido en el propio cuerpo o en el propio “ser” es evidente y suele ir acompañado de un alto grado de insatisfacción.
Con la Estimulación por Movimientos Oculares Rápidos -la intervención básica de la EMDR-, a menudo puede reducirse la sensación de insatisfacción interior. Este pequeño cambio por sí solo conduce a una percepción nueva y más positiva de uno mismo. La imagen de uno mismo mejora y se acerca a la imagen deseada.
Esto está relacionado con la confianza en uno mismo, que nos permite evaluar nuestras capacidades individuales y nuestro potencial de rendimiento con respecto a las exigencias de la vida. Esta evaluación se traduce en preocupación por la amenaza de exigencias excesivas o en un sentimiento de empoderamiento. Es precisamente “sentirse capaz” lo que allana el camino hacia una vida con propósito, ya que con más frecuencia tomamos el control consciente de la trayectoria de nuestras vidas que cuando nos acosan las dudas sobre nosotros mismos. Dudas que tratan de convencernos tanto de nuestra supuesta falta de aptitud y control como de nuestra excesiva dependencia.
El EMDR en autocoaching con la ayuda del Remstim3000 suele ayudarnos muy bien a reforzar nuestra autoimagen y autoconfianza y a llegar a una valoración más positiva de nosotros mismos.
Más información:
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